Sistema osteoartromuscular

Todos mis huesos dirán: ‘Oh SEÑOR, ¿quién hay como tú? Libras al pobre del más fuerte que él; al pobre y necesitado del que lo despoja'” –Salmo 35:10, RVA online.

Cuando en la creación Adán expresó: “Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada” (Génesis 2:23 online) se refirió a la manera especial como Dios creó al ser humano: Adán tenía conocimiento de la anatomía humana, ya que mencionó explícitamente los huesos, que sirven de esqueleto al cuerpo, y la carne; es decir, el sistema ósteoartromuscular (SOAM). Este sistema es el principal responsable de que podamos movernos y realizar todas nuestras actividades cotidianas.

El SOAM agrupa tres subsistemas: el sistema óseo, integrado por el esqueleto; es decir, todos los huesos de nuestro cuerpo; el sistema muscular; que permite el movimiento armonioso de todas las partes del cuerpo y el sistema articular; es decir, las uniones entre los huesos.  El buen funcionamiento de este sistema, como respuesta interna a estímulos externos, permite caminar, saltar, practicar deportes, y todo el resto de movimientos de nuestro cuerpo.

  • Sistema óseo. Provee de sostén al cuerpo, siendo la parte rígida del esqueleto, al conformarse por los huesos, de los cuales el cuerpo humano posee alrededor de 206, que permiten soportar y apoyar el peso corporal, nos mantiene erguidos, y protege los órganos del cuerpo. La caja torácica, resguardan al corazón, el hígado, pulmones y el bazo; mientras que la pelvis, preserva la vejiga, los intestinos y los órganos reproductores femeninos; la cavidad craneana y la columna vertebral, protegen el sistema nervioso: el encéfalo, y la médula espinal, con los nervios.

  • El sistema articular, conformado por las articulaciones, es el encargado de generar el movimiento, ya que está conformado por estructuras que ayudan a la unión de los huesos, permitiendo la flexibilidad y la locomoción. Si no tuviésemos articulaciones, nuestros huesos se dañarían con el roce entre sí.

  • El sistema muscular está formado por músculos, es decir, tejido fibroso con capacidad de contraerse, expandirse y tensionarse (ejercer fuerza). Nuestro cuerpo tiene alrededor de 650 músculos con funciones específicas. Los músculos recubren nuestros los huesos y dan forma a la estructura corporal.

Jesús dijo:Mirad mis manos y mis pies, que yo mismo soy; palpad, y ved; porque un espíritu no tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo” (Lucas 24:39 online). Nuestro Dios hizo todo perfecto, y el sistema osteoartromuscular es una maravilla de su amor, poder y sabiduría.

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