Sobre las aguas

El water strider (Gerris remigis) es una especie de insecto que consigue caminar sobre el agua. En el pasado, se pensaba que conseguía esa hazaña gracias a la secreción de una cera que lo mantenía flotando. Pero recientemente se descubrió que el water strider posee estructuras especiales en las patas. Ellas están cubiertas por innumerables y minúsculos pelos, llamados microsetae. Esos pelos tienen surcos que mantienen al insecto flotando, capaz de soportar, incluso, tempestades violentas.

Los responsables por ese descubrimiento fueron los científicos Xuefeng Gao y Lei Jiang, de la Academia china de Ciencias. Según los investigadores, los microsurcos localizados en los microsetae (pelos) retienen el aire y causan resistencia al agua en las patas del animal. Una única pata puede soportar 15 veces el peso del insecto.

Los científicos crearon una pata artificial revestida con una sustancia química altamente repelente al agua. La pata podría hasta soportar un water strider, pero no sería capaz de mantenerlo flotando bajo las fuerzas generadas por el insecto en movimiento. Conclusión: los responsables por la tremenda resistencia al agua son los microsetae.

“Este arreglo inteligente les permite a los water striders sobrevivir en el agua incluso bajo el “bombardeo” de gotas de lluvia, cuando ellos saltan para evitar ahogarse”, dijeron los científicos chinos a la revista Nature. “Nuestro descubrimiento puede ayudar a desarrollar pequeños dispositivos acuáticos y materiales a prueba de agua”, analizan pensando en el futuro.

Es la ciencia imitando a la creación, una vez más.

Ver video del Water strider: