Purificación del agua en la naturaleza

Purificación del agua en la naturaleza

El agua es indispensable para la vida. Sus cambios de estado permiten la circulación a través de los distintos ambientes: aéreos y terrestres.

Para que sea apta para el consumo humano, el agua debe ser sometida a procesos de purificación. Al ser un excelente disolvente, el agua se ve expuesta a una gran cantidad de contaminantes, que deben ser tenidos en cuenta para su eliminación.

Algunos elementos pueden ser orgánicos, como los pesticidas, los restos o fragmentos de plantas. Otros son elementos inorgánicos, como fosfatos, nitratos, dióxido de carbono, silicatos o cualquier otro producto químico natural o artificial.

Por otro lado, los microorganismos bacterianos son otro factor de contaminación. Existen distintos métodos empleados por el ser humano para purificar el agua y varían de acuerdo a su tiempo y costo.

En la naturaleza, los distintos suelos intervienen en la purificación de las aguas. En los suelos arcillosos, al ser impermeables, el agua queda mayor tiempo expuesta a factores dañinos con mayores posibilidades de contaminación. Por otro lado, en los suelos humíferos, los distintos estratos terrestres permiten el filtrado del agua para su posterior potabilización. En el caso de los suelos arenosos, al ser permeables, favorecen la filtración y la reducción de factores contaminantes externos.

Pero, no solo la estratificación del suelo influye en la purificación del agua. También existen organismos como las algas marinas que intervienen en el filtrado. A través de la biorremediación, las algas permiten la metabolización y filtrado de productos nocivos, entendiendo por biorremediación cualquier proceso biotecnológico que recupera el medio ambiente por medio de la acción de microorganismos, hongos, plantas o enzimas naturales.

La biorremediación asistida con microalgas resulta particularmente atractiva debido a su capacidad fotosintética, ya que permite convertir la energía solar en biomasa. Los procesos que realizan las microalgas están enfocados principalmente en la remoción de nutrientes y de metales pesados. (Ferrera, Rojas, Poggi, Alarcón y Cañizares, 2006).

En la naturaleza existen muchos modelos de purificación diseñados por el Creador para preservar la Tierra y la prosperidad de las criaturas. Estos mecanismos son un fiel reflejo de lo que ocurre en la vida espiritual. Dios desea que nuestros corazones sean purificados, así como las algas purifican las aguas.

“Como tenemos estas promesas, queridos hermanos, purifiquémonos de todo lo que contamina el cuerpo y el espíritu, para completar en el temor de Dios la obra de nuestra santificación”. 2 Corintios 7:1, versión RVR60 online.

Dios ha hecho provisión de cada aspecto del plan de Salvación para que nuestros corazones puedan ser limpios y aceptos a la vista de Dios, de nosotros depende la decisión de aceptarlo.