Dinosaurio en conserva

“Echen sobre él toda su ansiedad porque él tiene cuidado de ustedes.” (1 Pedro 5:7, Reina-Valera 2015 online)

Estaban todos corriendo de un lado para el otro. Algunos se abrazaban, otros miraban con admiración y todo el equipo estaba feliz. “Un descubrimiento increíble”, decían otros.

Fue descubierto por accidente, mientras unos mineros excavaban una mina en Canadá. De allí, llamaron a los investigadores del Museo Tyrrel de Paleontología Real, en Alberta, Canadá y asunto terminado. Habían encontrado el dinosaurio mejor conservado alguna vez hallado.

El estado de conservación era tan bueno que no podían verse los huesos, dado que el caparazón y la piel estaban aún ahí. ¡Claro que sí! Estaba completo, tanto que algunos científicos llegaron a decir que no debería ser llamado fósil sino momia.

Y más todavía. El estado de preservación era tan excepcional que incluso había contenido en su estómago. Una preservación sin precedentes en la historia de la paleontología, es decir, la ciencia que estudia los dinosaurios.

Un nodosauro misterioso

Nodosauro

Encontrado en una mina, en Canadá.

El dinosaurio era un nodosaurio, un vegetariano gigante que parece más un tanque de guerra que un dinosaurio, con una armadura que recuerda mucho a una tortuga. Fue encontrado en un estado que desafía las mejores teorías evolutivas, pues es posible observar el color de la piel usando aparatos y equipos especiales. ¿Y si supieras que era de un tono marrón verdoso oscuro en la parte superior y mucho más claro en la parte de abajo? ¿Qué dirías?

Pero el problema de los científicos, especialmente de los evolucionistas, era cómo pudo haberse preservado con tanto nivel de detalles durante supuestos millones de años.

A medida que se van descubriendo nuevos dinosaurios, es cada vez más complicado poder explicar cómo pudieron transcurrir tantos millones de años entre los dinosaurios vivos y nosotros.

La explicación de los científicos creacionistas señala que el Diluvio bíblico fue el fin de los dinosaurios, pero ese evento mundial no sucedió hace millones de años, solamente hace unos pocos miles de años. Y así todo se ajustaría mejor.

El Diluvio fue capaz de enterrar a los dinosaurios de forma rápida y con gran cantidad de tierra o sedimentos, impidiendo que el oxígeno y las bacterias iniciaran la descomposición. No sabemos exactamente cuántos miles de años pasaron, pero esos son los hechos o datos que poseemos.

Las evidencias apuntan al relato bíblico que nos cuenta la historia de la Tierra con todos sus detalles, junto con otras evidencias semejantes encontradas alrededor del mundo. Todo indica la existencia de un Dios Creador que desea tener un contacto mucho más cercano con las personas y no las ha dejado sin evidencias para explicar asuntos tan asombrosos como este dinodosaurio “en conserva”.

Entonces, ¿ya leíste tu Biblia hoy?