¡Probados por el fuego!

En el crisol se prueba la plata y en el horno se prueba el oro, pero al corazón lo prueba el Señor. Proverbios 17:3, versión NVI online.

¿Alguna vez has visto una llama en la cocina? ¿O una vela encendida? ¿Qué color tenían las llamas?

El color del fuego depende de dos cosas: la temperatura y el material que se está quemando.

Dependiendo del material que se quema, podemos tener variadas coloraciones.

Pero primero, analicemos la temperatura. Si miras una estufa a gas, por ejemplo, verás que la llama comienza azul, luego roja hasta anaranjado. La variación en la temperatura determina el color de la llama: a medida que aumenta la temperatura, pasa del rojo-anaranjado al amarillo, luego al blanco y finalmente al azul. El azul es el punto más alto de calentamiento.

Estos colores también pueden verse en la llama de una vela. La llama de la vela va relampagueando en varios colores mientras quema la mecha, en diferentes temperaturas, calentando y derritiendo la cera.

En una chimenea encontramos más colores, porque dependen del material de lo que está quemando. Cada sustancia, cuando se calienta, libera una especie de firma en forma de color, a veces combinando colores.

Al quemar diferentes sustancias y registrar sus observaciones, los científicos pudieron determinar el color de firma de cada una. Esa firma puede ser reconocida aún fuera de nuestro planeta, en todo el universo. Si cada elemento calentado libera un color, y esa es su firma, podemos observar esos elementos en el espacio, por ejemplo.

Observa la nebulosa de Orión. Mira los colores a través de la lente de un observatorio. ¿Puedes enumerar los colores e intentar saber qué elementos están presentes allí?

Cuando observamos el planeta Marte, vemos que predomina un color: el rojo. ¿Por qué? Porque allí abunda el elemento hierro. Impresionante, ¿no?

Dios anticipó en la Biblia que vendrán tiempos difíciles. La gente pasará por dificultades, como si fuese calentada en el fuego. Pero, recuerda: toda prueba va a pasar. En breve, todo llanto pasará. Hay que creer que esto va a ocurrir pronto.

Te invito a seguir descubriendo las obras de ese Dios maravilloso.